En Bárbaro el fuego no es un complemento, es el protagonista. Nuestro horno de brasa es la En Bárbaro trabajamos con fuego real. Nuestro horno de brasa es mucho más que una herramienta de cocina: es el alma del restaurante, el lugar donde el producto se transforma y el sabor alcanza otra dimensión. En un entorno urbano e industrial, propio de un asador urbano en Tenerife, el horno de brasa nos conecta con la esencia de lo primitivo y lo auténtico.

Cómo funciona un horno de brasa

El horno de brasa es una fusión entre horno cerrado y parrilla. Se alimenta con carbón vegetal, que al arder alcanza temperaturas que superan los 300 ºC. La diferencia frente a una parrilla abierta es que el horno concentra el calor y el humo, permitiendo:

  • Sellar carnes y pescados de forma uniforme.
  • Mantener los jugos en el interior del producto.
  • Potenciar el sabor gracias al ahumado natural.
  • Reducir el consumo de carbón, al conservar mejor la temperatura.

El resultado son carnes a la brasa jugosas y tiernas, pescados con un punto de humo inconfundible y verduras que sorprenden por su intensidad.

Un ritual diario: encendido y limpieza

En Bárbaro tratamos al horno de brasa con el mismo respeto que a la materia prima. Cada mañana lo encendemos con calma, dejando que el carbón alcance el punto perfecto antes del servicio. Y cada noche lo limpiamos a fondo para que esté listo para el día siguiente. Este cuidado garantiza no solo seguridad y sabor constante, sino también un espacio de trabajo impecable en la cocina.

Qué cocinamos en el horno de brasa

  • Carnes maduradas como el chuletón o la presa ibérica, donde el fuego saca lo mejor de cada corte.
  • Pescados frescos del Atlántico, que adquieren una textura dorada y un aroma único.
  • Verduras de temporada, caramelizadas en su punto y llenas de carácter.

La experiencia de un restaurante de brasa en Tenerife

Visitar Bárbaro es vivir un ritual. Nuestro concepto de asador urbano no se limita a servir un plato, sino a compartir la experiencia del fuego. En torno al carbón se genera comunidad, autenticidad y sabor sin filtros.

En definitiva, el horno de brasa es el corazón de Bárbaro: lo encendemos cada mañana, lo cuidamos cada noche y lo ponemos al servicio de lo que más nos importa, que es ofrecerte una experiencia honesta en torno al fuego.